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Contrato de Inversión Musical

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El contrato de inversión o investment agreement es vital para proteger los derechos e intereses del artista y su inversionista. No tenerlo suele crear confusión respecto a los derechos y obligaciones de las partes, lo que a su vez aumenta la probabilidad de contiendas y problemas legales. Por lo tanto, conocer cómo funcionan los contratos de inversionistas es clave para proteger tu carrera o inversión musical.

¿Qué es un contrato de inversión?

Un contrato de inversión en la industria musical con un artista es un acuerdo legal entre un inversor, que puede ser un individuo, una compañía o una entidad, y un artista, grupo o banda musical. 

Este tipo de contrato establece los términos y condiciones bajo los cuales el inversor proporcionará fondos y/o recursos al artista para apoyar su carrera musical y en qué términos se compartirán los beneficios y riesgos asociados a la inversión.

¿Cómo funciona un contrato de inversión?

Imagina que Alex Artista quiere lanzar su próximo álbum, pero no tiene el dinero suficiente para trabajarlo al nivel que visualiza. Por lo que habla con un amigo de su madre llamado Iván Inversionista.

Lo primero que ocurre es que Alex habla con Iván y le presenta la visión que tiene para este proyecto innovador, sus objetivos, el presupuesto que necesita y cómo utilizará la inversión. A esto se le conoce como un pitch. Iván acepta y decide firmar un cheque por $10,000 USD y 5% de interés anual. 

Alex e Iván preparan y firman el contrato de inversión simple que establece en detalle los términos y condiciones de la inversión, incluyendo aspectos como el monto y propósito de la inversión, el rendimiento de la inversión, la propiedad intelectual, la gestión y el control, los informes y la contabilidad, los términos y condiciones de salida, y las protecciones legales y cláusulas adicionales.

Iván le transfiere los fondos a Alex, quien se compromete a utilizar los fondos para financiar el lanzamiento de su próximo álbum. Tiempo pasa, Alex lanza el álbum, y comienza a generar ingresos. 

Esos ingresos se distribuirán entre Alex e Iván de conformidad con lo que hayan pactado en el contrato de inversión, por ejemplo, 50-50 hasta que Iván recupere su inversión.  

Además, Alex envía informes financieros y contables trimestralmente a Iván que incluyen detalles de los ingresos generados y cómo se han compartido entre ellos.

Si Iván nota algo raro, puede llamar a su equipo contable para auditar o examinar los registros financieros de Alex para asegurarse de que los pagos y las cuentas sean precisos y estén en línea con los términos del contrato.

Dos años más tarde, Iván recuperó su inversión con intereses y terminó el contrato. 

¿Qué sucede si un artista y un inversionista trabajan sin contrato?

Trabajar sin un contrato por escrito puede llevar a problemas y disputas debido a la falta de claridad y protección legal para ambas partes. Algunas de las posibles consecuencias de no tener un contrato son:

  1. Falta de claridad en las expectativas y responsabilidades: Sin un contrato, las partes podrían tener malentendidos sobre sus roles, responsabilidades y expectativas, lo que podría generar conflictos y frustraciones.
  2. Disputas financieras: La ausencia de un contrato claro sobre cómo se repartirán las ganancias, regalías o ingresos entre el artista y el inversionista puede dar lugar a disputas financieras y malentendidos.
  3. Falta de protección legal: Sin un contrato, las partes no tienen una base legal sólida para hacer valer sus derechos en caso de incumplimiento por parte de la otra parte. Esto puede dificultar la resolución de disputas y exponer a ambas partes a riesgos legales y financieros.
  4. Problemas de propiedad intelectual: Sin un contrato que defina claramente la propiedad de las grabaciones, composiciones y otros activos creativos, las partes podrían enfrentarse a disputas sobre la propiedad intelectual, lo que podría afectar la distribución, explotación y monetización de la música.
  5. Falta de protección de la confidencialidad: Un contrato suele incluir cláusulas de confidencialidad que protegen la información sensible y confidencial de ambas partes. Sin un contrato, no hay garantía de que esta información se mantenga confidencial, lo que podría dar lugar a filtraciones o mal uso de la información.
  6. Riesgo de pérdida de inversión o recursos: Sin un contrato, el inversionista podría correr el riesgo de perder su inversión si el proyecto no funciona como se esperaba o si el artista no cumple con sus compromisos. Del mismo modo, el artista podría arriesgarse a perder los recursos y el apoyo financiero proporcionados por el inversionista.
  7. Dificultades para atraer a otros socios o inversionistas: La falta de un contrato puede hacer que otras partes, como socios comerciales, otros artistas o inversionistas, sean reacios a colaborar o invertir en el proyecto, ya que no hay una base legal clara que defina y proteja sus intereses.

En resumen, trabajar sin contrato en la industria musical puede generar malentendidos, disputas y riesgos legales y financieros para ambas partes. Es fundamental contar con un contrato bien redactado y detallado que establezca las responsabilidades, expectativas, protecciones legales y términos financieros para todos los involucrados.

¿Qué información suele incluirse en un contrato de inversión?

La información que suele incluirse en un contrato de inversión abarca:

  1. Información de las partes: Identificación de las partes involucradas en el contrato, incluyendo nombres, direcciones y detalles de contacto.
  2. Definiciones: Clarificación de los términos y conceptos clave utilizados en el contrato.
  3. Monto de la inversión: Especificación del monto total que el inversor proporcionará y el calendario de desembolso.
  4. Propósito de la inversión: Descripción detallada del proyecto o negocio en el que se invertirá el capital y cómo se utilizará el dinero.
  5. Rendimiento de la inversión: Explicación de cómo se compartirán las ganancias y pérdidas entre el inversor y el receptor de la inversión, como porcentaje de participación en las utilidades, dividendos, intereses o regalías.
  6. Representaciones y garantías: Declaraciones de las partes sobre la exactitud de la información proporcionada y cualquier garantía asociada a la inversión.
  7. Condiciones precedentes: Requisitos que deben cumplirse antes de que se realice la inversión, como aprobaciones regulatorias, due diligence o cumplimiento de ciertos hitos.
  8. Gestión del proyecto o negocio: Detalles sobre cómo se administrará el proyecto o negocio, incluyendo la estructura de gobierno, responsabilidades y roles de las partes involucradas.
  9. Informes y contabilidad: Requisitos de informes financieros, incluyendo la frecuencia y el formato de los informes, así como las auditorías y el acceso del inversor a los registros financieros.
  10. Cláusulas de protección al inversor: Provisión de derechos y protecciones para el inversor, como el derecho a voto, la participación en las decisiones importantes y la capacidad de vender o transferir la inversión.
  11. Términos y condiciones de salida: Explicación de cómo el inversor puede retirarse del proyecto o negocio, como la venta de acciones o la recompra de la inversión por parte del receptor.
  12. Cláusulas de resolución y término: Condiciones bajo las cuales el contrato puede ser terminado o resuelto, como incumplimiento de contrato, insolvencia, cambio en las circunstancias o acuerdo mutuo de las partes.
  13. Confidencialidad: Acuerdo de las partes para mantener en secreto la información confidencial relacionada con el contrato y la inversión.

Estos son solo algunos ejemplos de la información y las cláusulas que se pueden incluir en un contrato de inversión.

Cada contrato puede variar según las necesidades y acuerdos específicos entre las partes, y es importante que revises y comprendas completamente el contrato antes de firmarlo. 

¿Qué cláusulas principales incluye la plantilla de contrato de inversión?

Bajo la membresía PRO, tienes acceso a nuestra bóveda de contratos musicales que incluye una variedad de plantillas y ejemplos que puedes utilizar como base. A continuación, verás la explicación de las cláusulas principales y algunos tips que te ayudarán a utilizar estas herramientas a tu favor.

Inversión

Esta cláusula establece que el inversor acuerda proporcionar una cantidad específica de dinero al artista o talento para financiar un proyecto musical específico. 

Además, se especifican el monto total de la inversión y los métodos disponibles para hacer la transferencia. 

Rendimiento

Esta cláusula indica que el inversor recibirá un porcentaje del ingreso generado por el proyecto musical durante un período de tiempo específico o hasta que se recupere completamente la inversión. 

Después de este período inicial, el inversor seguirá recibiendo un porcentaje de los ingresos durante un período adicional que también será especificado en el contrato.

Crédito del proyecto

Esta cláusula establece si el inversor recibirá crédito como coproductor ejecutivo del proyecto musical y aclara que el inversor no tendrá derechos sobre la propiedad intelectual del talento, excepto los otorgados explícitamente en esta cláusula.

Contabilidad y auditoría

El talento debe proporcionar informes financieros semestrales al inversor, incluidos los estados de cuenta y los pagos adeudados después de deducir gastos permitidos, si corresponde. Los informes deben describir las transacciones relevantes para el período semestral en cuestión.

Lo anterior incluye el derecho del inversor a examinar los libros y registros del talento con respecto a las declaraciones de regalías.

Término y resolución

Esta sección describe las condiciones bajo las cuales el contrato puede finalizar o resolverse.

Además, se establece que el contrato comenzará en una fecha específica y continuará indefinidamente. Si el talento se declara insolvente o enfrenta problemas legales similares, la inversión del inversor se considerará una deuda asegurada por las fuentes de ingresos del proyecto.

Cláusula moral

El talento se compromete a mantener un comportamiento adecuado y a no dañar su propia reputación ni la del inversor. Además, el talento debe informar al inversor sobre cualquier problema o situación negativa que surja en sus plataformas digitales o a nivel personal.

Retro actividad

Las partes reconocen que el inversor puede haber proporcionado fondos antes de la firma del contrato. En ese caso, el contrato se aplicará de manera retroactiva a los desembolsos realizados previamente.

¿Es necesario un abogado para crear un contrato de inversión?

Aunque no es estrictamente necesario contratar a un abogado para crear o modificar un contrato, siempre es recomendable consultar a un abogado especializado en derecho de música y entretenimiento para redactar o revisar contratos y documentos legales. 

Referencia:

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