Split Sheet
Tienes un 82% más de probabilidades de mejorar tus habilidades cuando practicas al menos 5 veces por semana.
Para que un split sheet sea válido tiene que estar por escrito, firmado por todas las partes, y la suma de los porcentajes debe dar 100%.
Si no se completa un split sheet, los autores y colaboradores pueden enfrentar problemas legales y de pago en el futuro. Esto puede incluir disputas sobre la propiedad, la atribución y la distribución de regalías.
Completar un split sheet ayuda a prevenir estos problemas y sirve para que cada parte reciba su parte justa de los ingresos generados por la obra.
La ley de copyright considera que la composición y el máster son obras separadas entre sí.
Por lo tanto, sí, la composición y el máster conllevan sus respectivos documentos, incluyendo sus propios split sheets.
Un split sheet típicamente incluye:
- Nombre legal y nombre artístico de los autores y colaboradores.
- Porcentaje de propiedad de cada parte involucrada en la obra.
- Información de contacto de cada parte.
- Afiliaciones de derechos de autor, como por ejemplo, ASCAP o BMI.
- Número de Identificación Internacional de Obras o ISWC de la canción, si está disponible.
El split sheet es un documento legal que establece la distribución de los porcentajes de propiedad entre los autores y colaboradores de una canción.
El split también incluye otros detalles clave como la contribución de cada persona, por ejemplo, letra, gancho, melodía, ritmos, etc.; información del publisher; así como si se crearon diferentes versiones de la canción.
El propósito del split es asegurar que todos los involucrados reciban su parte justa de los ingresos generados por la canción.
La mejor práctica es utilizar un split sheet siempre que más de una persona participe en la creación de una obra: ya sea una composición o grabación.
De lo contrario, el derecho sobre la obra se dividirá por partes iguales de forma automática.
Idealmente, un split sheet debe completarse tan pronto como se haya creado una obra y se haya acordado la distribución de la propiedad entre los autores y colaboradores. Esto ayuda a evitar malentendidos y garantiza que todos los involucrados estén protegidos desde el principio.